11 mar 2014

[Reseñas] Killing Season

Nunca es tarde para crecer

Grandes actores en su tiempo, ídolos de generaciones, y veteranos ante la mira del lente. Killing Season es apuesta por lo conocido, donde no te defraudarás pero no encontrarás nada extraordinario. Una película que se quiere desligar de lo cotidiano del cine de acción, fanservice y suspense yendo por una senda reflexiva (la cual medianamente cumple su función como supuesta catarsis ) la cual nuestros personajes son ex-combatientes marcados por una guerra que arrastran hasta el presente.

Robert De Niro otrora Vito Corleone, alias 'Benjamin Ford' es un soldado militar estadounidense en retiro el cual se ha aislado del resto del mundo (incluyendo su familia) en los Montes Apalaches estadounidenses. Ford, que no tiene nada más importante que hacer que disfrutar de la naturaleza, la soledad y el silencio del bosque se ve interrumpido por la entrada de Emil Kovac (Jhon Travolta), un turista serbio con el cual entabla una temprana amistad. Nadie sabe si es mejor dejar el pasado atrás o vivir con él, a veces el dolor es parte de nosotros, queramos o no. Dos cazadores se enfrentarán, uno está preparado, el otro nunca lo estuvo.

Más información tras el salto.


A los 70 años se pueden hacer muchas cosas aparte de actuar. Con una interpretación regular, llenando las expectativas de los menos exigentes, se puede decir de que De Niro apuesta por un film bastante sobrio a comparación de los films que son parte de su época dorada. Manteniendo un ritmo físico activo alrededor de toda la película, podemos resaltar que a pesar de las escenas con dobles, utilería y demas, De Niro logra sorprender a más de uno saltando y corriendo por los campos de Terranova y Labrador.

Conservado como en sus mejores años, pero no con el mejor estado físico, Travolta nos muestra un personaje que posee algunos matices del común serbio, pero sin llegar a lo sofisticado. Plano podría llamarse a un personaje el cual solo tiene pocas aspiraciones, pero un solo objetivo: La venganza. Digamos que Emil Kovak se encuentra con el doblez de la hoja al tener ciertas habilidades de persuasión y un dialecto curioso y por veces forzado.

Un apartado visual destacable, armas rústicas y algunas escenas crudas son lo que nos ofrece Killing Season. Disfrútala en la tarde, cuando no haya nada más que hacer.

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